Metalero contento que agua sucia de Valencia le devolvió la vida a sus pantalones negros
Ciudadanos en el estado Carabobo expresaron su descontento al recibir agua de color negro desde las griferías de sus hogares. Sin embargo, esto no fue una mala noticia para todo el mundo, pues un selecto grupo de metaleros usaron el agua increíblemente sucia para recuperar el color de sus pantalones desteñidos y seguir viviendo como si estuvieran en 1994.
Gabriel Núñez de 35 años es un metalero clásico con tatuajes de los que ya se arrepintió, franelas con nombres de bandas noruegas que siempre incluyen la palabra “canibalismo” por alguna razón y un odio exagerado al reguetón a pesar de vivir en el siglo XXI. Pero el estilo de vida de Gabriel se vio aliviado gracias a la crisis por la que pasa el servicio de agua en Valencia que le permitió reavivar su closet de dos pantalones y cinco camisas Ovejita ya grises, pero que gracias a la suciedad del agua carabobeña regresaron a su antigua gloria. “Mira, que yo sea metalero no significa que no me importe el cuidado de la ropa. Tengo años con mis franelas de Bloody Assassins, Cannibal Exorcism y Black Asado. Las lavo a mano, les pongo suavizante y no las meto en la secadora. Pero con el tiempo dejaron de verse negras y pasaron a ser como la personalidad de Jaua: súper gris. He estado queriendo comprar otros pantalones negros así holgados, pero esta pelazón lo ha puesto difícil y además ahora todo lo venden slim fit. Mi mamá me decía que le echara wiki-wiki negro, pero llevo rato buscando y nada. Lo bueno es que la falta de mantenimiento y la ignorancia de Hidrocentro me salvó la vida. Eché esos jeans viejitos bajo el chorro del fregadero por dos horas y quedaron como nuevos. Lo único malo es que ahora cuando salgo de la casa, mi mamá me dice que huelo mal, pero eso no es la ropa”, dijo Gabriel mientras escuchaba la discografía de A Fistful of Doom por 6ta vez en el día.