La emigración en Venezuela ha obligado a millones de personas a dejar sus pertenencias detrás, dándolas en herencia a amigos, familiares o sus ex. Así fue el caso de Ricardo López (27), un joven quien por seguir en el país, tiene más de 3000 televisores heredados de sus amigos y no tiene idea de qué hacer con ellos.

López declaró sobre la acumulación de televisores y otros regalos que tiene en su casa: “Todas estas cosas tienen un valor especial porque cuentan muchas historias. Todo empezó más o menos en 2010 cuando Titi me regaló su 32 pulgadas al mudarse a New York para estudiar Administración de Contaduría de Turismo con Cadivi. Al principio todo chévere, no pensé que tuviese más de una tele regalada, pero después fue Andrés quien por motivo de su viaje a Irlanda a estudiar inglés con alguna empresa fantasma que lo dejaría en la calle también me dejó su tele. Y así, pare de contar, Stefano, Valeria, Federica… Todos me dejaron sus teles en buen estado. Mi mamá me regañó unas cuantas veces porque estaba recibiendo demasiados televisores, hasta le acepté uno a Juan que se fue a Perú por tierra. Pero ahora que todos se fueron tengo aproximadamente 3000 teles. Puedo poner un canal en cada uno sin rollo. Eso es lo bueno” sentenció López mientras mostraba su inmensa colección de Playstation 2 y regalos de exnovias que no eran de él.