El señor que rayó las paredes de la oficina presidencial de Miraflores con creyones de cera, Nicolás Maduro, ordenó esta semana a la seguridad del Aeropuerto Internacional Simón Bolívar que contrataran porteros de discoteca que reboten a cualquier persona que tenga intenciones de conspirar contra su “gobierno”, como cualquier misión diplomática que venga de parte de la Asamblea Nacional.

Maduro, quien en sus tiempos de ir a discotecas siempre pedía el “Culiquitaca” para bailar en la pista, agradeció a la empresa de seguridad “Team hasta el Dosmil Siempre, C.A” por prestar a sus mejores hombres para ser los rebotadores oficiales del Aeropuerto de Maiquetía: “Fíjense, esta mañana quiso entrar una misión diplomática de Europa a Venezuela como Pedro por su casa, ¿pues saben qué les digo? No van a pasar, ¡no, no y ño! Para pasar a Venezuela tienen que venir bien vestiditos, zapatos de vestir, una camisa Columbia bien planchadita y tener una mesa con un servicio ya cancelada, además que vienen para acá y no traen culitos ¿Qué creen, que esto esto es una fiesta de bomberos? ¡Menos mal ahí están mis rebotadores! Porque acá nada más pasan los amigos del dueño, que soy yo, ¿no?”, aseguró Maduro, mientras pedía que también contrataran al DJ Nené Sarcos para ambientar la rampa 4.