La máxima figura de la iglesia católica, el Papa Francisco, estrenó este jueves, frente a numerosos peregrinos, su nueva prenda papal: un casco de astronauta con el fin de ignorar totalmente las distintas situaciones de las que prefiere hacerse la vista ciega, como es el caso de la situación política en Venezuela.

Jorge Mario Bergoglio, quien por años también ha ignorado otros temas sensibles —como ¿por qué el niño Jesús debe entregar regalos en Navidad?— justificó ante sus seguidores el uso de este nuevo gorro papal: “Quiero dedicarles un momento divino para enseñarles mi nuevo accesorio al que bendigo para que nuble mi visión ante los pequeñísimos problemas, como la violación de derechos humanos en un pequeño país del cono sur. Muchas personas me han pedido que tome posición sobre las situaciones del mundo, pero a eso les contesto como lo haría el Señor: en mi mano derecha está nuestro Padre y en mi mano izquierda están todos mis amigos gobernantes. Con este sombrero papal puedo dedicarme a solucionar los problemas que aquejan a nuestros siervos de Dios, como dejar de incurrir en adulterio o poner canciones de Chayanne en los 15 años”, aseguró el Santo Padre mientras pedía unos tapones de oídos papales para ignorar las preguntas sobre pedofilia.