Ante la llegada de la inminente temporada de lluvias, la compañía venezolana de transporte marítimo CONFERRY anunció hoy la inauguración de una nueva ruta en la ciudad de Caracas, que irá desde La Bandera hasta Plaza Venezuela.

«A pesar de los fuertes meses de sequía, nadie se preocupó en pensar qué iba a pasar cuando llegaran las lluvias.»

–William Gutiérrez

William Gutiérrez, presidente del ente naviero, afirmó estar contento, ya que esta medida convierte a CONFERRY en los únicos en tomar las previsiones para la época de lluvia. “¡Era de esperarse! A pesar de los fuertes meses de sequía, nadie se preocupó en pensar qué iba a pasar cuando llegaran las lluvias. Bueno, no culpo a nadie: así ha sido Venezuela desde los tiempos de la Conquista y la Colonia. Pero con esto, demostramos por fin estar un paso por delante de la Naturaleza. No voy a mentirles, eso sí. No fue fácil, tuvimos fuertes críticas, sobre todo cuando empezamos a subir los barcos por la autopista Caracas – La Guaira. La gente nos dijo de todo; nos dijeron desde locos a Maduro, pero sin embargo nos mantuvimos fuertes y mira. Ahora con los árboles caídos que obstruyen las vías, las quebradas desbordadas por la chatarra y al basura, las obras de canalización mal hechas y el Metro inundado, la solución del transporte capitalino es por agua. ¿Quién es el loco ahora, ah? Y esta primera ruta solo es el comienzo. En los próximos días estaremos abriendo más: Petare – La Pastora, Chacaíto – Altamira – Prados del Este y la tan esperada ruta que llegará a Guarenas y Guatire. ¡Estamos contentos!” aseguró Gutiérrez, quien aclaró que las rutas no incluirán transporte comercial porque, total, ya no hay nada en el país.

Pero a pesar de lo dicho por Gutiérrez, CONFERRY no es la única compañía que se adelantó a esta situación; la línea de mototaxis “Los Delfines de la Capital” se prepara para plantarles una fuerte competencia. “No menor, en lo que la pure dijo ‘Ay mijo, huele a lluvia’ llame a los convives para hablarles claro; siempre nos aguevoneamos y terminamos bajo un puente, esperando a que la lluvia pase, y perdiendo los reales, pues. Así que vendimos todas las Bera’s y nos compramos sendas motos de agua. Ya te hago hasta caballito de mar, jajajaja, hago.” concluyó Germán Torrealba, vocero de la línea de mototaxis, mientras se iba y le tumbaba un retrovisor a un ferry.