Bueno, llegó el día. 10 de octubre. ¿Saben lo que significa, no? ¡Sí, que comienza el béisbol! Es decir, ya pueden devaluar sin ningún peo, subir el dólar 20%, 30%, porque total, vamos a estar todos pendientes de un chalequeo, de imprimir «unas arepas» para ponérselas en el escritorio a los panas, y una vaina. Sí, «arepas», las mismas que ya no podemos hacer porque la harina PAN no se consigue. Pero no importa que pasemos hambre, porque total, ya comenzó el béisbol. La temporada en la que el gobierno nos pone a todos en 3 y 2.

El gobierno va a aprovechar que todos comienzan a hablar de ponches, de carreras o de la ola en el estadio para que no hablemos de la medida impopular anunciada a medianoche, de los recortes, de la censura. Ah, sí, porque esa es otra: viene una vaina de censura. Pero me imagino que esperarán el primer Caracas – Magallanes para anunciarlo. Y agarrarnos a todos fuera de base. Así son ellos, ¿sabes? Pero así somos nosotros también, nos encanta la jodedera. Y ellos lo saben.

Se acaban los dólares. Le debemos el culo a los chinos. Sigue la escasez. No estamos produciendo un carajo. Hay inseguridad que jode. Pero no importa, no le des click a ninguno de esos links, porque no vale la pena. Más bien sácala de jonrón; el Gobierno te invita a que hagas click aquí y veas cuándo juega tu equipo, para que vayas con tus panas a vacilar en el estadio. Y cuidadito con estar viendo el bullpen, porque aunque nos estén cayendo a palo, el lineup no se cambia.