Chavistas ortodoxos del año 4013 critican a quienes comen azúcar, leche y mantequilla
La tarde de hoy, mientras el pasante subpagado limpiaba nuestra útil máquina del tiempo, la encendió por error y fue transportado al año 4013. Al regresar, nos explicó sobre el encuentro que tuvo con el ala ortodoxa de la Iglesia Chavista, que critican a la gente —entre otras cosas— por comer azúcar, leche y mantequilla.
“Fue una experiencia que cambió mi vida. El año 4013 es difícil, pana, muy difícil. Si usted cree que para ese entonces tendremos carros volando por las ciudades, comidas que se hacen de pastillitas y pasantes-robots que van a la panadería a comprar café, se va a llevar tremendo chasco. Bueno, si existen todavía pasantes en el futuro; pero la verdad es que la Venezuela del 4013 es una cosa bien medieval. Todo gira en torno a esta religión” comentó el pasante subpagado, quien cargaba en su cuello una inyectadora de oro, símbolo de la Iglesia Chavista, mediante el cual representan la inoculación de la enfermedad mortal que según el chavismo, asesinó al presidente Chávez. “La Santa Suprema Apostólica y Bolivariana Iglesia Chavista es la principal religión de Venezuela; más de un 88% de la población la practica. Los devotos tienen unos Meses Santos donde conmemoran los actos Sagrados: todo lo que le pasó al gran Hugo Chávez desde la gesta del 4 de febrero hasta su deflagración atómica. Esos días son de asueto y reflexión; el país se paraliza y los chavistas más ortodoxos incluso condenan a los que consumen azúcar, leche y mantequilla, ya que según ellos son lujos que no existían en la época de Chávez. También, se quitan el Internet y salen todos a matarse en las calles para conmemorar como eran las cosas en la primera década del siglo XXI.”
Nuestro pasante nos explicó que entre los rituales religiosos de los Meses Santos destacan “La búsqueda de comida”, en la cual los feligreses trata de buscar de mercado en mercado insumos básicos de la canasta alimentaria. También sobresale la llamada “La paradura del dólar” donde los vecinos esconden sus divisas y los locales van casa por casa consiguiendo quien se los venda a un precio menor de 350 BsFFFFFFFx10f por dólar. También está la vista al Túnel Sagrado, un túnel inconcluso del ferrocarril del centro, donde, según cuenta la leyenda, una vez el Profeta Chávez tuvo un incidente con una diarrea. Allí ofrecen corazones de escuálidas vírgenes en sacrificio a una estatua del Gran Líder, y se sientan a esperar que brote diarrea de la estatua, lo que representará un año de buenos precios de lituólio, combustible sustituto del petróleo que por suerte tiene su mayor reserva natual en Venezuela. Pero el acto más importante de todos es «La Procesión del Divino Chávez” cuando los venezolanos sacan en procesión una estatua del Presidente por las calles, para que vea los problemas del país y no haga nada al respecto.