El ministro de relaciones interiores, boxers e hilos, Remigio Ceballos, anunció la prohibición de venta de bebidas alcohólicas –comúnmente conocida por los borrachos como “Ley Seca pa’ los gafos”– para este fin de semana, por lo que el señor Alirio Moreno se vio obligado no sólo a hacer compras nerviosas de alcohol a último minuto, sino también a empezar a beber de una vez “por si pasa una vaina”.

Mientras hacía la cola en el supermercado con la esperanza de que le cayera la quincena antes de pasar la tarjeta, nuestro pasante subpagado tomó las declaraciones del señor Moreno: “Berro chico, es que esta gente sí jode con esa ley seca, ¿ah? Al final esa vaina no la respeta nadie, pero después te quieran vender una botella de ron a cambio de un Optra puro porque ‘ay es que nos regañan’. Yo como soy un hombre precavido tengo mi carrito lleno con las vainas básicas para una emergencia como esta pues, medio kilo de arroz, dos cajas de cigarros, 37 cajas de cerveza y una cajita de condones por si un compadre se pone cariñoso”, concluyó Moreno, mientras se bebía a fondo blanco la botella más barata del establecimiento.