Luego de la denuncia realizada por la líder opositora María Corina Machado sobre la vandalización del pelo del chavista opositor José Brito, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) condenó los hechos e inició una investigación capilar para entender por qué alguien decidiría hacerse eso a sí mismo. 

En una alocución de emergencia James Cavallaro, presidente de la comisión, lamentó los hechos y haber visto los hechos: “La CIDH condena al ataque de José Brito al mundo al mostrar la aberración que se ha hecho en el pelo, en el que se habría dejado una piscina arriba, un degradado y luego una barba sin bigote, produciendo una especie de Anuel con sobrepeso combinado con el señor Burns. Sin duda una grave violación a varios derechos humanos, incluyendo el derecho a no ser torturado que claramente ha sido violentado en todos aquellos que vieron al político de Maduro. Asimismo, se exhorta a los organismos venezolanos a no ver eso y a garantizar la seguridad de la gente expuesta a ver eso, así como a sancionar al señor Brito y a su barbero por este atentado a la humanidad. ¿A quién se le ocurre? Es que ni a Genghis Khan se le hubiera ocurrido algo tan cruel y perturbador” aseguró  Cavallaro antes de echarse cloro en los ojos.