Ante la inminente llegada de las vacaciones, la isla de Margarita sorprendió a todo el mundo al huir a Europa sin avisar, para así alejarse de todos los turistas que de otra manera hubieran llegado en los próximos días.

“¡Sí, sí, sí, muchacho! Ya estoy cansada, mi alma, todos los años es lo mismito. Llega este poco de navegeaos sin la mínima educación y me vuelven mierda como les da la gana, para luego regresar a sus casitas y dejarme todo el alboroto. Hijo’rdiablo, ¿y quien recoge el reguero que dejan? ¿Las cavas de anime rotas? ¿Los millones de juguetes de playa que todos los niños botan? ¡Nadie! Me dejan nada más el desastre y un poco de hippies supuestamente «argentinos», seguramente nacidos en el Táchira o algo peor. ¡Nada más de pensarlo se me pone la carne de gallina, Virgencita! ¡Que va! Por eso este año, me fui con tiempo pa’ Europa. Me coloqué cerquita de Inglaterra, pero más abajito de Islandia, porque eso es muy al norte y ahí pega sol nada más como 2 horitas ar día. Eso sí, las que están gozando una bola son las empanaderas; esas cristianas ahora haciendo las empanadas con sarmón, que es baratísimo por acá. ¿Tú has visto?» comentó la Isla de Margarita, dándose sus aires europeos con una bufanda que dice «Yo amo a Juangriego».

Minutos después de hablar con la Isla de Margarita, nos comunicamos con la Isla de Wight, al sur del Reino Unido, quien confesó que la isla latinoamericana está causando problemas con sus nuevos vecinos. “Primero, se está llevando a todos los turistas. No podemos competir contra esas playas azules y hermosas, pero lo que más nos molesta es que pone música a todo volumen en las noches y pareciera no importarle sus vecinos. También parece que allá no reciclan ni procesan las aguas, entonces lanzan toda su porquería al océano y todos tenemos que aguantarnos eso. Es inaceptable. Totalmente inaceptable. Además, ayer estuvo como 4 horas ofreciéndole a Groenlandia venderle unos pantalones sin compromiso, y al final quiso engañar a Irlanda con un cuento de una cosa que se llama CADIVI o algo así” comentó la isla de Wight, quien aseguró que varias de las islas europeas no pudieron dormir ayer por culpa de una presentación del Conde der Guácharo que se prolongó hasta las 3 de la mañana.