Al igual que miles de ganaderos en todo el país –y Acarigua–, Roberto Arrieche Rojas está harto de las constantes amenazas, robos y, particularmente, las vacunas impuestas por grupos paramilitares. Sin embargo, más que por un tema económico, su verdadera molestia es moral, ya que Rojas está convencido de que los guerrilleros son responsables de causar autismo al ganado.

Enviamos a nuestro pasante subpagado en danta hasta El Guamito, Barinas, donde el señor Rojas le explicó las razones por las que se considera un ferviente anti vacunas y apasionado defensor del amor humano-bovino: “Yo de verdad ya estoy es cansado de todos esos becerros guerrilleros pidiendo vacunas por aquí, con respeto a los becerros, que en realidad son animales muy nobles. Todas esas armas y ese plomo que cargan encima es dañino, tóxico para el cebrero, lo atrofia, pues. De paso dicen que ofrecen protección, pero eso lo que hace es dañar el sistema inmunológico del ganado. No es casualidad que cada semana pasan a pedir la plata y cada semana una vaca, un becerro o un sobrino se vuelve autista, ¡esto no puede ser, chico! Aprovecho aquí para hacer un llamado a las autoridades y al ministerio de salud, para que prohíban la circulación de guerrilleros en el país, que están propagando el autismo a donde quiera que van. Y también les pido de una vez por todas que aprueben el matrimonio igualitario entre humanos y animales, porque amor es amor, sin importar la especie”, exigió Rojas, mientras grupos armados del ELN se llevaba secuestrado a nuestro pasante subpagado hasta el Catatumbo.