Wilson y Andel, un par de peligrosos delincuentes que azotan a los Valles del Tuy, lograron esta tarde una de sus hazañas más peligrosas de su ya larga carrera: desactivaron una bomba casera que se encontraba en las afueras de un banco con la finalidad de robarse los cables del artefacto explosivo.

Los criminales, conocidos por trabajar en dúo y trapear mientras asaltan, conversaron sobre el hecho mientras secuestraban a nuestro pasante subpagado: “Mira, puede que Wilson y yo no sepamos nada de bombas pero somos rolo e’ inteligentes, ¿oíste? Bicho estábamos mamando y locos, tratando de encontrar unos buenos cables que nos ayuden a abrir carros, ventanas, maletas, toda verga. Pero coño, la vaina está ruda. Ahora la gente casi no tiene cables auxiliares en los carros y ya no quedan cables de CANTV por robar; cada vez que abres una tanquilla ves que alguien más se los llevó. Así que decidimos destruirle el plan a la dupla que es nuestro archienemigo:  Saion y Lemox. Alguien nos había rateado que esos tenían una bomba puesta por un banco y peo. Bien brutos que son, porque en los bancos no hay plata, bicho. El mío, me sentí así como que igualito que en esas películas de Misión Imposible. Pero el de esa película era una firi firi que me pude haber raspado ahí mismo. Eso fue adrenalina pura, corta aquí, corta allá, ¿es la roja o la azul? Mano, de película, te digo”, concluyó Andel, quien luego dejó en libertad a nuestro pasante cuando le dijimos por teléfono que ni 5 bolívares pagaríamos por su rescate.