Hoy, en las instalaciones de la Unidad Educativa Católica El Milagro de la Rosa de Guadalupe, la maestra Xiomara López envió una citación a los representantes del alumno de 4to grado B, Enrique Mora, para conversar con ellos sobre el grave comportamiento de su representado quien, según acusaciones de sus compañeros, personal directivo y hasta el señor de la cantina, es tremendo «sapo».

Xiomara, quien por su nombre estaba condenada de por vida a estar soltera y consumir Consul, detalló las razones de la citación. “Tener que hablar con representantes es engorroso y no quería hacerlo porque uno: creí que el niño podía corregir su conducta solo, y dos: porque me daba pena decirle a sus padres ‘Miren su hijo es un pajúo’, pero cuando Enrique me acusó con la Directora de haberlos puesto a hacer dibujos libres dos días me molesté e inmediatamente agarré el cuaderno de enlace y los mandé a llamar. Es que de verdad el comportamiento de este alumno deja mucho que desear. Nadie en el salón quiere ser su amigo porque los manda a hacer silencio cuando se está dando la clase, acusa a los que lanzan taquitos y hasta me recuerda a mí revisar las tareas. ¡Por Dios, no parecen cosas de un muchacho! Y eso no es lo peor, porque también nos enteramos que abrió un procedimiento legal en el Ministerio de Educación para denunciar que el aceite con que fríen los tequeñones en la cantina está viejo y obviamente lo está, es una cantina, todos los saben. En fin, la idea es ver qué hacemos con este chico porque ahorita es primaria y está bien, puede que no pase a mayores, pero de grande tú sabes que a los sapos se les da de baja y yo no quiero eso porque al final es mi alumno y lo quiero muchísimo”, finalizó la maestra Xiomara mientras se encerraba en un baño para poder fumar sin que Enrique la viera y la acusara.