El día de ayer, cientos de motorizados entorpecieron el tráfico de Caracas, en protesta por la supuesta reaparición de jeringas llenas de sangre con el virus del VIH en las salas de cines del país.

Las protestas ocurrieron en las principales vías caraqueñas y se desarrollaron de manera pacífica, afectando solo a 4 millones de habitantes de la ciudad. Entre las muchas consignas que gritaban los motorizados se encontraban «¡No más jeringas, no nos gusta el SIDA!» y «Ya es la hora, no a las inyectadoras». Uno de los manifestantes, Felipe Duarte, aseguró que uno de sus tíos tiene un amigo al que le contaron sobre uno de los casos. «Chamo, sí está pasando, es verdad. Están volviendo a poner inyectadoras llenas de SIDA en los cines. La población tiene que ponerse las pilas en estos casos, no podemos quedarnos dormidos ¿Quién va a cuidarnos si no lo hacemos nosotros mismos?”

Por su parte, Gustavo Fermín, uno de los afectados por la manifestación, aseguró que en realidad todo es una cortina de humo del Gobierno. «¿Es que nadie se da cuenta? El Gobierno está inventando historias raras para que la gente se escandalice y se olvide de la crisis económica. No es casualidad que hayan vuelto los rumores de las prostitutas que lanzan papas con hojillas y que el chupacabras apareció en Chacaíto con una lata de Diablitos que tenía una cola de rata adentro. Además, apenas VTV cubrió la protesta, Maduro salió proclamando una Ley anti-Agujas con Sida y otra Ley Anti-Chupacabras. Y ni hablar de que Maduro acusó a Ocariz de estar poniendo las agujas en los cines.” Comentó Fermín quién de ahora en adelante irá al cine con una almohada en las nalgas y pedirá que prendan las luces.