La conocida historia de Alberto Alexander Chirinos y Esmeralda Azuaje, la pareja que se casó en una cola para sacarse la cédula, llegó a su triste final el día de ayer, cuando se divorciaron mientras hacían la cola para pagar en un Farmatodo. La relación, que duró 6 años, se desgastó por las excesivas colas a las que fue sometida. Chirinos, el más dolido por la separación, explicó que «es muy difícil mantener una relación así. Fíjate, nuestra luna de miel se desarrolló en una cola para poner gasolina. Allí duramos unos 4 meses. Luego vinieron momentos más difíciles, porque vivimos un par de años en la cola para el pasaporte, ¡Qué dolor, qué recuerdos! Y después, lo peor, las colas para comprar comida. Si me preguntarán donde se acabó todo, creo que fue allá: en el Dakazo, ahí ya todo se vino abajo. Yo solo espero que algún día nos volvamos a encontrar, así sea en la cola para que nos atiendan a los dos en un hospital, cuando estemos viejitos» dijo un dolido Chirinos quien confesó que otro momento difícil fue el nacimiento de su hijo mientras hacía una cola para comprar una batería de carro.