Mucha gente nos reclama que «este no es momento de chistes». Créanme, lo sabemos de sobra. Por eso vamos a decirte algo muy en serio: Maduro le regaló 500.000 dólares a Trump para que celebrara su triunfo. Sí, al mismo y verdadero pelucón, Donald Trump que según él quiere tumbarlo. 500.000 dólares. Qué loco, ¿no?

Ayer mucha gente salió —salimos— a dar la cara por lo que cree. A gritarle al mundo que no nos vamos a rendir ante un régimen que tiene los anaqueles de los supermercados y las farmacias vacíos, pero se gasta los pocos dólares que quedan en armamento, perdigones, gases lacrimógenos y guayaberas rojas talla XXL. Perdón, se me fue un chiste. Pero más chiste aún es donar dinero y pagarle la ceremonia de inauguración al «villano infame» que mueve los hilos de sus lacayos para acabar con este gobierno tan bueno que tenemos. Perdón. Se me salió ese otro chiste. Imagino que para nosotros es difícil dejar de hacerlo.

Otro chiste, y ya con esto no los molesto más, se los prometo: Al gobierno le pareció muy gracioso que ayer la gente saltara al Guaire mientras le huía a la represión de la Guardia Nacional ¿Sabías que se metieron en una deuda de 300 millones de dólares para limpiarlo… y nunca lo hicieron? ¡Jajaja, se suponía que estaría listo jajajaj el año pasado jajajaja y seguro se robaron esa jajajaj esa jajajaj esa plata! Ay, que buen chiste.