El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, reaccionó con furia a las acusaciones de haberse acostado con una prostituta de 17 años. «Me siento burlado, ella me juró que tenía 15» habrían sido sus primeras declaraciones ante los cargos de corrupción de menores y prostitución por el caso de Ruby Robacorazones, una «bailarina exótica» marroquí que lo señala de haberle pagado 7.000 euros y joyas por «servicios prestados».

«Sí, hicimos el bunga-bunga, claro que sí lo hicimos. ¿Por algo le pagué, no? Pero debo señalar que ella me engañó. Me juró  que tenía 17 años. Hasta un documento me mostró.  Pregúntele a cualquiera de las otras 20 mujeres que nos acompañaban ese día. Ella mintió descaradamente» afirmó Berlusconi, que enfrenta un nuevo escándalo, el trigésimo séptimo desde que asumió las riendas de Italia y apenas el cuarto en lo que va de 2011.

Berlusconi acusó a sus opositores de dar un vuelco político al caso, que se ventila en un tribunal de Milán. «Esos señores no pueden estar viendo política en todo lo que uno hace. Uno se emborracha y se quejan. Uno se acuesta con 15 mujeres, 3 perros y un enano y protestan. Uno usa una partida secreta para pagarle a unas strippers y se arrechan. ¿Es que esa gente no vive?» afirmó Berlusconi, mientras enrrollaba unos spaguetti del vientre de una prostituta. «¡Todo el tiempo con esa bendita doble moral Por eso es que estamos como estamos».