El presidente Cubano, Raúl Castro, propuso el sábado limitar a un máximo de 10 años de permanencia en un mismo cargo de poder a todos los funcionarios del gobierno que no tengan el apellido Castro.

“Resulta recomendable limitar a un máximo a dos periodos consecutivos de cinco años el desempeño de cargos políticos y estatales fundamentales, es necesario que una generación de relevo tome el mando de cualquier puesto que no sea la presidencia de Cuba, pues ese rincón está reservado para mi familia por razones de conveniencia y logística”, afirmó Raúl Castro, en un potente discurso ante los delegados al Congreso del Partido Comunista.

Raúl, a quien Fidel Castro cedió en el mando después de 40 años en el poder, hizo una fuerte autocrítica de la dirigencia de su partido, llamando a refrescar el gobierno con sangre fresca. “Yo, por ejemplo, estoy usando una crema rejuvenecedora sensacional, y desde hace meses duermo dentro de un Tupperware, como en la serie esa Eerie Indiana, ¿Qué buena era verdad? ¿Qué? ¿Ah no la han pasado acá? Disculpen, se me olvidaba que los únicos que podemos tener cable en la isla somos los Castro”.

Para algunos analistas, las nuevas medidas del gobierno podría ser contraproducentes, pues el apellido Castro es bastante común en Latinoamérica, y esto dejaría la puerta abierta a posibles contendores políticos como el cantante mexicano Cristian Castro, quien ahora podría ser el próximo dictador de Cuba.