Enfermeros del Psiquiátrico el Peñón lograron recluir a la señora Magaly de Rubio, acérrima opositora al Gobierno Nacional, luego de ser diagnosticada con una fuerte depresión clínica. Los familiares de la afectada revelaron que la depresión se debió a que la señora descubrió que el candidato presidencial, Henrique Capriles Radonski, ha besado a otras 500.000 señoras.

Ulises Rubio, hijo de la señora Magaly, relató los hechos que llevaron al encierro de su madre. “Siempre le habíamos escondido que Capriles besaba a otras señoras, desde que ella llegó hace unos meses emocionada porque Henrique le había dado un beso. Ella dijo que él la había visto a los ojos, que la amaba y pues ninguno de nosotros pudo desilusionarla, le seguimos la corriente y ahí fue cuando se complicó. Cada vez que Capriles salía en Globovisión, teníamos que montarnos en el techo de la casa y desconectar el DirecTV para que no viera nada. Pero ninguno de nosotros se imaginó que esto llegaría hasta tan lejos; y todo explotó este domingo en la marcha. Mamá no paraba de pedirnos que la lleváramos donde estaba Capriles, que supuestamente no paraba de preguntar por ella. Cuando lo encontramos, lo vimos besando y abrazando a dos señoras. Mi mamá entró en un colapso y se descompuso, tuvimos que llevarla a la clínica.”

Luego de que Magaly despertó, su familia permitió el paso de varios periodistas a la zona donde se encontraba internada. Allí, la señora dio unas breves palabras a los medios. “Mi corazón no puede con tanta desilusión. No me había pasado esto desde que Caldera decidió indultar al innombrable. Yo pensé que era única para Capriles, que era el amor de su vida, que viviría el resto de mis días con él y tendría una bella familia desde un vientre alquilado porque por más que quiera ya yo no te puedo andar en esos planes. Pero no, parece que Henrique tiene a otras quinientas mil señoras, yo sólo fui una más en su campaña electoral. Lo nuestro fue algo político. Si no fuera porque el otro candidato es el inquilino de Miraflores, votaría por él. Incluso, quién sabe si hasta voto por el tercer señor ese que se inscribió en las elecciones.” Culminó la señora Magaly, antes de confesar que se lavará su mejilla por primera vez desde diciembre.