En un ataque de sinceridad poco usual, el presidente Nicolás Maduro aseguró haber pedido esta semana una Ley Habilitante para, según sus propias palabras, seguir haciendo lo que le da la gana sin ningún tipo de impedimentos.

«Igualito yo puedo legislar, firmar, autorizar, decretar y hacer todas las cosas que yo quiera. Para eso Chávez me eligió, ¿no?»

–Nicolás Maduro

«Me preguntan que por qué pido una Habilitante. ‘Maduro, ¿por qué pides una Habilitante’, me dijeron. Mentira, nadie me lo preguntó, pero yo se los digo para hacerme sentir importante, pues. Les tuve que decir la verdad: porque quiero, puedo y me provoca que alguien en la Asamblea trabaje. Yo le dije a Diosdado, que ahí lo que tenía era una pila de vagos, así que vamos, señores y señoras diputados y diputadas de la Patria, vamos a trabajar, así sea redactando un documento. Por más nada, porque igualito yo puedo legislar, firmar, autorizar, decretar y hacer todas las cosas que yo quiera. Para eso Chávez me eligió, ¿no? Para que continuara lo que él hacía» dijo Maduro ante una sorprendida audiencia, boquiabierta ante el extraordinario arranque de honestidad. El primer mandatario prosiguió con su alocución: «La oposición chilla porque yo ahora tengo la Habilitante, ¡si son llorones! ¡Pelucones llorones, a llorar pa’l Valle! ¿No se dan cuenta que es lo mismo? Yo hago lo que me da la gana igualito, y para muestra están las intervenciones a las empresas y los monstruos de Ramo Verde y cuando ceno panquecas, que es comida de desayuno. Dejen la chilladera y agradezcan el formalismo. Me hacen molestar y cuando me molesto le batuqueo la comida a Cilia. No me hagan pelear con Cilia».

Maduro también explicó estar alerta a la reacción de los políticos ante su reciente desempeño: «he escuchado a algunos camaradas molestos, me han llegado algunos rumores, nosotros tenemos oídos en todos lados. Es un decir, porque solo tenemos dos oídos, ¿ven? Hemos puesto micrófonos en todas sus oficinas pero eso es otra cosa. Yo les digo que a esta patria yo vine a trabajar, no a echar carro ni a estar sentados por ahí todo el día esperando que me manden en un papel con lo que yo tengo que decir. Solo yo puedo hacer eso» dijo Maduro mientras se pintaba el bigote con un Sharpie negro que se encontró en su escritorio.