Venezolano emigrante afirma que lo más fuerte de emigrar es tener que trabajar
Antonio Marcano, un joven de 25 años que emigró a México hace aproximadamente 6 meses, afirmó hoy que lo más fuerte de haber dejado atrás a Venezuela es tener que trabajar.
«Otra cosa es que no se puede hacer más nada aparte de trabajar: si te rebuscas vendiendo dólares te miran como si fueras un loco»
–Antonio Marcano
“Todos creen que es un jamón, pero qué va, chamo: esto de emigrar no es fácil, no señor. Porque sí, uno consigue de todo en el mercado, hace nuevos amigos, lee las noticias en Internet de lo que pasa allá o incluso llamo a la familia de vez en cuando —que es algo que ni en Venezuela hacía—, pero la cagada es que para conseguir plata a juro hay que trabajar y bastante. Coño, tan progresistas que son, ya deberían haber inventado una cosa para mantenerlo a uno, ¿no? ¿Una ayudita, no? Porque es durísimo, men: además tienes que cumplir los horarios, respetar a los supervisores y si es el caso al cliente también. ¿Puedes creer esa vaina? No lo dejan a uno ni revisar Facebook, lo tienen bloqueado. Porque aquí no hay inamovilidad que te proteja, te dan tu patadota si te agarran echando carro, y perder el trabajo, ¡ja!, yo te aviso. Otra cosa es que no se puede hacer más nada aparte de trabajar: si te rebuscas vendiendo dólares te miran como si fueras un loco y si hablas con un militar para que te cuadre una licitación puedes hasta ir preso. ¡Qué bolas!” aseguró Marcano mientras regañaba a su primo —que es dueño de la casa donde se está quedando desde que llegó— porque le robó una lonja de jamón.