La pandemia del “agüevonamiento” cobra otra víctima en la ciudad de Caracas, Venezuela. Juan Carlos Estrada, joven bachiller del Instituto Los Altos, fue diagnosticado esta mañana con “agüevonamiento crónico”..

La madre del joven decidió llevarlo al médico luego que su hijo mostrara muy bajo desempeño en sus estudios. El doctor Luís Medina López explicó el cuadro sintomático que presentaba Juan Carlos: “Aquí estamos ante un típico caso de agüevoneamiento. Luego de numerosas pruebas psicoterapéuticas y físicas, el joven también resultó ser un gran pendejo. El paciente tiene problemas para concentrarse y enfocarse, se distrae fácilmente con cualquier cosa colorida y se muestra somnoliento a los pocos minutos de iniciar cualquier tarea”, indicó el galeno.

El doctor informó que se encuentra en franca expansión: “Es una condición médica delicada y sumamente contagiosa. Cuando usted se halle cerca de una persona infectada con agüevoneamiento, lo mejor es alejarse. Es importante estar atento y reconocer los síntomas. Los más comunes son: cara de gafo, lentitud excesiva, negativas de ir a la panadería a comprar pan, mucho tiempo frente a la computadora y desconocimiento fuerte de la actualidad nacional”.

Hasta el momento, no se ha encontrado una cura a este terrible mal “Varios investigadores están trabajando en la vacuna contra el agüevoneamiento, la cual se ha probado en perros Basset Hound. Los resultados no han sido del todo positivos, algunos canes han salido del letargo, pero otros han empeorado. Es importante que la población sepa que el aguevoneamiento, al igual que el chavismo, es una enfermedad totalmente tratable, hay que eliminar el tabú alrededor de esta condición”.